- Arnold Böcklin – La Isla de los Muertos, 1880
Aunque sea en el Infierno: Mejor es
Reinar aquí que servir en el Cielo.
-John Milton.
Bien que diré sobre este blog…. Originalmente se iba a llamar Hijos del Tiempo, titulo de un poema que escribí hace mucho tiempo, pero termine descartando la idea en pro de Milton, el poeta ingles y su obra “ Paradise Lost”, pero al final cedí ante Arnold Böcklin y su cuadro La Isla de los Muertos… bien… pero el blog no se llama así, o si.. Pues no al final decidí nombrar el blog como “La Isla de los Nombres Muertos”, comencemos por las siguientes preguntas, ¿Por qué Isla?, ¿Por qué Nombres Muertos? Y ¿Por qué El Paraíso Perdido que en vamos intentamos recobrar? .
Isla, bien dije anteriormente que había un cuadro de A. Böcklin que me había llamado mucho la atención cuyo titulo es “La Isla de los Muertos”… aparentemente esta obra fue un encargado de una joven viuda que quería un cuadro para soñar… si, eso mismo dije un cuadro para soñar, de hecho el titulo original de la obra de la cual, el pintor varias versiones era “un lugar tranquilo”… bien dejemos a un lado la isla, y sigamos “Nombres Muertos”, H. P. Lovecraft fue un peculiar escritor norteamericano, creador junto con un grupo de amigos de una mitología bastante bizarra, cuyo libro canónico es llamado o traducido al español como el Necronomicon o el Libro de los Nombres Muertos, en dicho libro relata un tiempo antes del sueño del nombre, donde la tierra era gobernada por seres venidos de otras dimensiones, y que fueron condenados por querer rebelarse contra fuerzas aparentemente del bien, el líder de estos dioses era llamado Cthulhu y se supone que esta encerrado en algún lugar del Pacifico sur. De este se supone que esta muerto pero aun sueña, dicha condición Lovecraft cita en La llamada de Cthulhu lo siguiente:
«Que no está muerto lo que puede mantenerse eternamente,y con extraños eones hasta la muerte puede morir.»
Bien sobre la tercera pregunta, es sencilla, hemos perdido, algo, como colectivo humano así lo sentimos, a través de los evos, diferentes culturas se lo han preguntado, en Occidente, dentro de los cánones mas ortodoxos del cristianismo, lo llamamos El Paraíso, el cual según el relato del Génesis, el hombre perdió por desafiar al Creador, y consiguió el conocimiento pero, al igual que Prometeo, tuvo su castigo y con el La Muerte entro a la humanidad, dicho argumento sirve de base para Milton y su obra cumbre “ Paradise Lost”.
Milton, tengo entendido escribió otro libro llamado “El Paraíso Recobrado”. Bien no he leído esta segunda obra de Milton, pero al igual que Milton se intenta recobrar algo, eso que perdimos y no sabemos, el Back to Adam cortazariano, pero bien que perdimos, no lo sabemos, como lo he dicho, solo esta esa vaga sensación que inquieta nuestro espíritu, y nos mueve a una prolongada búsqueda inexorable que nos ha llevado hasta lo profundo de nuestro sub-conciente pero sin lograr encontrar, eso que es precisamente lo que buscamos, y que tramos de ver o creer que a través de los sueños, ensayo que noche tras noche ejecutamos sobre la muerte, creemos que talvez podamos encontrar acaso, aquello que creemos recobrar por tan solo unos instantes, como ese Oliveira que creía o quizás creyó encontrar a La Maga en Talita y como Neruda, que intenta contener esa vaga sensaci{onde perdida en un mundo sin tiempo ni espacio, eso que decía el bueno y afable de Neruda, que “El perfume de las ciruelas que rodando a tierra/ se pudren en el tiempo, infinitamente verdes”, o como el tiempo en Dalí que se pudre, se degenera, se desintegra, pero aun persiste la memoria, como en ese tiempo de terrible tiempo de Eliot que nos atrapa en un pasado, presente y futuro, tal como J. Barbour nos describe, un tiempo muerto donde estamos condenados infinitamente a un suerte de eterno presente donde siempre estamos naciendo, muriendo, llorando o riendo, quizás leyendo estas líneas.
Pero mientras intentamos descifrar la anatomía de ese tiempo perdido, y descubrir lo que se ha perdido, ese Paraíso oculto, que como nos recuerda Cortázar nefastamente en Rayuela:
“Sólo en sueños,
en la poesía,
en el juego,
nos asomamos a veces
a lo que fuimos antes
de ser esto que vaya a saber
si somos…”
Así hasta que recobremos eso, que se perdió, lo que en vamos buscamos y que creemos que yace oculto en la nervadura de las hojas del té, y que una vieja adivina cree encontrar lo que los locos no lograron hacerlo, hasta ese preciso momento, único en el tiempo y el espacio, y es que solo, quizás al igual que el Cthulhu de Lovecraft (y Lovecraft mismo) y la joven viuda para la cual Böcklin pinto su cuadro, esa respuesta, lo que hemos perdido y intentamos recobrar nos esta vedada en el sueño y la muerte, pero si la muerte misma puede ser vencida según Lovecraft y solamente él, el sueño cortazariano me produce pesadillas y quizás me de pistas de lo que busco y no encuentro, pues hasta el día que muera y quizás encuentre eso, lo que precisamente he buscado o hemos buscado siempre, pues hasta no llegar a ese momento, nos dedicaremos a lo banalmente mundano.
31/08/08 at 8:44 pm
Todo está entrelazado………en el tiempo y en el espacio….nada puede escapar a esta cadena….de eventos…………
sigue buscando, para no permanecer en el olvido, sigue buscando para no morir ………..
20/11/08 at 7:12 pm
Que intenso y que hermoso esta tu blog!
Nos hace tripar!
Un abrazo y gracias x añadirme a tus recomendaciones.
Un abrazo!
El Hijo de La Bohemia.
20/11/08 at 10:12 pm
Gracias…
siempre seras bienvenido en este lugar….
saludos…
30/03/10 at 5:41 am
[…] mi primer blog “La Isla de los Nombres Muertos”, estaba perdiendo su norte, y era buscar el “Paraíso Perdido” y se estaba orientando mas para el birding y mis aventuras en la naturaleza, ahora he decido […]
18/06/11 at 10:30 pm
Amigo eres un genio buscador.
Deberias leer «El libro de los Espiritus» de Allan Kardek;
A personas como tu y yo suelen gustarnos estas cosas
Hasta pronto:
Aristobulo